Ha pasado casi un año desde que el parque El Centenario se llenó de vida con las vibraciones del rock, y este 2024 no es la excepción: el evento más esperado por la escena alternativa de Ibagué ha regresado, trayendo consigo a los fieles devotos de este ritual sonoro.

Por: Saray Moreno.

Ha pasado casi un año desde que el parque El Centenario abriera sus puertas a la fiesta más esperada por la escena alternativa de la ciudad de Ibagué, un evento que reúne a artistas locales, nacionales e internacionales alrededor del rock; una celebración visceral donde el escenario se convierte en altar, la música en ritual y el público en una comunidad de fervientes devotos.

Según Henry Reina, vocalista de la banda de Thrash/Hardcore INGRAND, hace unas décadas “todo cabía dentro del rock y todos éramos rockeros; no importaba si hacías metal, hardcore, punk, country, postpunk o indie”. Sin embargo, con el tiempo, esa diversidad fue cambiando y las bandas comenzaron a organizarse en géneros.

Siguiendo esta evolución, el cartel del primer día de Ibagué Ciudad Rock XXIII.

– 2024, comenzó con una fuerte presencia de bandas representativas del metal y el hardcore. Difamación, la banda encargada de inaugurar el festival, abrió con su explosivo Hardcore Punk Crust, llevando al público a reflexionar sobre temas como el ambientalismo, el respeto por los animales y la situación en Palestina. Psylock tomó el relevo, arrollando con la contundencia de sus ritmos Groove y Nu Metal, manteniendo la energía al máximo. Para cerrar esta parte del cartel, el Metal Alternativo y el Metal Moderno hicieron su aparición con las potentes actuaciones de Renacido e INGRAND, quienes ofrecieron una poderosa combinación de riffs y letras cargadas de intensidad que resonaron profundamente entre los asistentes al festival.

La transición de ritmos estuvo a cargo de 130 BPM, una banda de origen valluno que ofrece una descarga frenética de Ska fusionado con Rock Alternativo y Nu Metal. Su estilo, que ellos mismos describen como “un sancocho valluno”, desató una energía única en el escenario. A continuación, Mortis y los Desalmados tomaron el relevo. Formada en 2019, esta banda ha logrado destacar por su sonido enérgico y distintivo, fusionando el country y el bluegrass con la irreverencia del punk. Al igual que 130 BPM, Mortis apuesta por letras cargadas de denuncia social y sátira política, manteniendo la crítica y el inconformismo en el corazón de su propuesta musical.

Cuando Los Malkavian subieron a las tablas, la sombra producida por el frac de Drácula se tomó la escena de la XXIII edición del ICR. Como bien indica su nombre, Los Malkavian son un antiguo clan de vampiros, reconocidos por su peculiar habilidad de escuchar voces en su cabeza y contagiar su locura a los demás mediante el ejercicio de Dementación. Locos, poetas, torturados, traumados y lunáticos: así se definen las letras de Los Malkavian. Introspectivas, tristes y pesimistas, sus letras invitan a una reflexión profunda, pero también son contagiosas, al igual que la salsa, que en su tristeza se transforma en un baile. Desde las profundidades de Medellín, Los Malkavian han emergido con su fusión única de postpunk, tomando influencias de los clásicos de finales de los años 70 y trayéndolas a la modernidad con un toque oscuro y envolvente. Formados en 2019, esta banda combina sonidos hipnóticos, líneas de bajo profundas y letras cargadas de autocrítica y sarcasmo, abordando temas como la locura, la muerte, la confusión y la soledad.

Cuando la tristeza se transforma en belleza, posee, a diferencia de otras emociones, una capacidad increíble para transmutar hacia un estado mucho más elevado: el de la resiliencia. Y este ha sido el mensaje con el que la banda de origen ibaguereño MEDVED ha logrado a travesar el corazón del público local. Hace dos años, esta agrupación, formada durante pandemia, inauguró el escenario del Ibagué Ciudad Rock. Desde entonces, su base de seguidores ha crecido tanto a nivel local como nacional. Cada vez que MEDVED sube a un escenario queda la sensación de estar viendo a los próximos Beatles. Esta afirmación, lejos de ser exagerada, refleja la impresionante capacidad musical de estos jóvenes talentos ibaguereños.

El cierre de este primer día del festival estuvo a cargo de Armenia, una banda de origen bogotano en cuyos sonidos resaltan el rock alternativo y el indie. Desde su formación hace tres años, Armenia ha lanzado cuatro álbumes, entre los cuales se encuentra su más reciente creación, el EP Nube Gris. Armenia puede llevarte a experimentar sensaciones íntimas y personales como el amor y el desamor, pero también lanzarte a vivir una ráfaga de energía con ritmos colombianos. El cartel del primer día del Festival Internacional Ibagué Ciudad Rock estuvo marcado por una serie de ritmos y géneros que retumbaron en los oídos y la memoria de sus asistentes. Punkis, metaleros, hardcoreros, nostálgicos, adultos y jóvenes, quienes, sin importar el género, hicieron parte de este festival. “A la mierda los géneros”, gritó Psylock desde las tablas, y es que aquí todos somos hijos del rock, y el ICR es nuestra casa.

octubre 12, 2024
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